JUNEAU, Alaska (AP) – Los viajeros no residentes que viajen a Alaska deberán demostrar que dieron negativo para COVID-19 poco antes de llegar como parte de un esfuerzo dirigido a minimizar los casos y preservar los suministros de prueba y el equipo de protección, dijo el gobernador Mike Dunleavy.
«No estamos tratando de dificultar que la gente venga aquí», dijo Dunleavy durante una conferencia de prensa el martes por la noche. «Solo queremos asegurarnos de que estamos cuidando primero a los habitantes de Alaska».
Los cambios entrarán en vigencia el 11 de agosto y requerirán que los no residentes lleguen con resultados negativos de una prueba realizada 72 horas antes de la llegada. Dunleavy dijo que se están resolviendo los detalles de la aplicación.
Actualmente, los viajeros tienen varias opciones de prueba, incluida una prueba dentro de los tres a cinco días posteriores a la partida a Alaska y la prueba en un aeropuerto cuando llegan a Alaska. Aquellos que optan por no realizar la prueba pueden ponerse en cuarentena durante 14 días. En cuarentena, uno debe abandonar su ubicación solo para emergencias médicas o atención médica necesaria.
Dunleavy indicó que la cuarentena ya no sería una opción para los viajeros no residentes bajo los nuevos protocolos.
«Creemos que es mejor ir directamente a un enfoque de prueba que requiera que las personas tengan un negativo», dijo. «Entonces, si vienes a Alaska, deberías tener un negativo».
Algunas personas dirán que esto es una carga o un problema, dijo.
«No hay duda de que todos los aspectos de nuestras vidas se verán afectados por este virus, incluidos los viajes», dijo Dunleavy.
Los residentes de Alaska aún pueden hacerse la prueba en los aeropuertos, dijo.
La Dra. Anne Zink, directora médica del estado, dijo que ha habido un «rápido aumento» en nuevos casos entre residentes y no residentes. Los viajes no parecen ser el principal impulsor del reciente aumento de casos entre los residentes de Alaska, según una diapositiva que presentó el martes.
Muchos de los nuevos casos de residentes se encuentran entre los que tienen entre 20 y 30 años, con casos entre los residentes de entre 20 y 30 años, según la diapositiva.
Zink exhortó a los residentes a evitar grandes reuniones, particularmente aquellas en interiores; usar cubiertas faciales en público, particularmente cuando está cerca de otros; y lavarse las manos como una forma de frenar la propagación del virus.
El estado ha reportado casi 2,800 casos de COVID-19 que involucran a residentes y 645 que involucran a no residentes. También ha reportado 22 muertes relacionadas con COVID-19.
El municipio de Anchorage dijo el miércoles que estaba abriendo cinco sitios de prueba adicionales. El alcalde Ethan Berkowitz recientemente impuso límites a los tamaños de recolección y al número de personas permitidas en bares, restaurantes y lugares de entretenimiento en respuesta a los crecientes casos de coronavirus allí.
Bill Falsey, comandante del incidente en el centro municipal de operaciones de emergencia, en un comunicado dijo que el aumento de la capacidad de prueba «conduce a una identificación más rápida de los casos y una contención más efectiva de la enfermedad».
Para la mayoría de las personas, el coronavirus causa síntomas leves o moderados. Para algunos, especialmente los adultos mayores y las personas con problemas de salud existentes, puede causar enfermedades más graves y la muerte.