Limpieza facial… ¿sólo por la noche?

Respóndenos con sinceridad… ¿cuándo limpias tu piel, por la mañana o por la noche? Lo cierto es que la mayoría de las mujeres lo hacen cada noche, al final del día, para retirar los restos de maquillaje y de suciedad. Pues bien, en una ‘rutina beauty’ completa, no sería suficiente. No basta con limpiar y desmaquillar el rostro por la noche, y, poco a poco, los productos de limpieza facial matinal son cada vez más demandados, más aún teniendo en cuenta que es un hábito que tan sólo nos ‘robará’ unos minutos al empezar el día.

Partimos de la idea de que una piel limpia es una piel sana. Por ello, la limpieza facial es una rutina indispensable tanto para la higiene como para mantener la piel del rostro más luminosa. Factores externos como la contaminación ambiental e internos como el estrés hacen que nuestra piel pierda su vitalidad. Según Marta Gamarra, directora de Formación de la firma Eve Lom en España: “Tan sólo será necesario dedicarle dos minutos a la limpieza matinal y tres para aplicar el tratamiento adecuado en función de nuestro tipo de piel”.

Es muy común que surjan dudas aún sobre por qué debo limpiar mi piel por la mañana si me desmaquillo correctamente cada noche. Existe una explicación para ello, tal y como nos apunta Gamarra: “Durante la noche se incrementa la secreción de grasa de la piel, por ello es recomendable realizar una limpieza cada mañana para eliminar ese exceso de grasa, devolviendo así su luminosidad, y sobre todo su juventud, ya que esta rutina no se trata de una cuestión de edad sino de calidad de la piel. Sin una piel perfectamente limpia, incluso hasta los mejores tratamientos pueden resultar en vano”.

Así, si no se realiza una limpieza adecuada, poco a poco nuestra piel se volverá apagada y cetrina. Empezaremos a acumular impurezas como comedones o puntos negros y provocaremos un envejecimiento de la piel mucho más rápido, ya que se acumularán mayor cantidad de bacterias negativas sobre la superficie que desencadenarán en la aparición de radicales libres produciendo un envejecimiento de nuestra piel a una edad mucho más temprana. Por lo tanto, para limpiar el rostro optaremos por un limpiador suave que respete nuestra piel y equilibre nuestro pH. Ahí va una selección.

De izquierda a derecha: Eau de Confort Nettoyante Express, de Clarins, Solución Micelar Fisiológica de La Roche-Posay, Gel Moussant Purifant Sébium de Bioderma; Agua micelar Dragon’s Blood Cleansing Water, de Rodial; Wash Sepai, suave espuma, que limpia sin debilitar; Gel limpiador Normaderm de Vichy; Morning Cleanser de Eve Lom.