Juneau

Alaska extiende cierres para servicios de cena, gimnasios, teatros tras confirmación de 143 contagios en el estado

UNEAU, Alaska (AP) – Los funcionarios estatales extendieron el miércoles prohibiciones indefinidas a los servicios de comidas en restaurantes y bares y el cierre de instalaciones como gimnasios y teatros, ya que buscan frenar la propagación de COVID-19 en Alaska.

Hasta el miércoles, había un total de 143 casos reportados de coronavirus en el estado, que incluye 10 nuevos casos anunciados en una conferencia de prensa a última hora del día. Alrededor de 5.000 personas han sido evaluadas hasta el momento, según el departamento de salud del estado.

El nuevo coronavirus causa síntomas leves o moderados para la mayoría de las personas. Pero para algunos, especialmente los adultos mayores y las personas con problemas de salud existentes, puede causar enfermedades más graves, como neumonía y muerte.

El comisionado de salud estatal, Adam Crum, dijo que las restricciones extendidas anunciadas el miércoles permanecerán vigentes hasta que se rescindan. Inicialmente, expirarían el miércoles. El cierre de las bibliotecas, archivos y museos estatales a las visitas públicas se extendió de manera similar.

Mientras tanto, el estado presentó una queja legal contra un hombre de Anchorage que acusa de comprar respiradores y venderlos a «precios desmesurados» en línea en un esfuerzo por sacar provecho de las preocupaciones por el coronavirus.

La queja contra Juan Lyle Aune alega violaciones de una ley que prohíbe el comercio injusto y las prácticas comerciales, y busca sanciones financieras. Los registros de la corte no incluían un abogado para Aune, y una lista de teléfonos juzgada por The Associated Press no funcionó.

La queja alega que Aune generalmente compró 20 paquetes de respiradores por entre $ 17 y $ 23 en tiendas locales. Entre el 10 de febrero y el 16 de marzo, vendió paquetes en Amazon a un precio promedio de $ 89.25, según la demanda. También alega que realizó otras ventas en eBay.

La reventa de respiradores por «precios desmesurados durante un momento de mayor necesidad y alta demanda … ofende las políticas públicas», viola los conceptos de justicia y no es ético, según la demanda.

El Secretario de Justicia de los Estados Unidos Kevin Clarkson se refirió al caso como aumento de precios, que según el Fiscal General Adjunto John Haley implica aprovechar una emergencia.