Los datos del estado de Alaska sobre el COVID-19 muestran una imagen mucho más tranquila de la pandemia ahora que en cualquier otro momento desde que comenzó.
Según las cifras del Departamento de Salud actualizadas el martes, la COVID es responsable de sólo el 1,8% de las hospitalizaciones en el estado, y las muertes relacionadas con la COVID han descendido a niveles no vistos desde que el virus llegó a Alaska en marzo de 2020.
Y, sin embargo, los habitantes de Alaska todavía están contrayendo COVID y, en algunos casos, tratando de navegar por la vida después de dar positivo. Entonces, ¿qué se supone que debe hacer la gente con esa información ahora?
La Dra. Anne Zink, Jefa del Servicio Médico de Alaska, dice que eso depende. COVID, dice, sigue formando parte de nuestras vidas, y no está preparada para declarar la victoria todavía.
Pero la realidad es que es un virus muy diferente ahora de lo que era hace tres años. Y cuando vemos a la gente contraerlo, tiende a ser más como lo que veríamos con otras enfermedades virales, donde alguien podría ser mayor, inmunocomprometido, son más propensos a enfermarse y asociarse con él. Si son jóvenes y sanos, tienden a recuperarse bastante rápido. Y siempre hay excepciones, pero en general, está causando mucho menos daño a los individuos, así como en lo que estamos viendo en el servicio de urgencias.